Algunas empresas lideran el camino en términos de visión y uso de la tecnología más reciente. Una de esas organizaciones es Picomel Nutrition, con sede en Zeewolde (Países Bajos). Picomel desarrolla y produce comida en lata de alta calidad y de marca privada para bebés, niños pequeños y niños de preescolar. Proporciona el embalaje y también produce una fórmula exclusiva para bebés que necesitan una dieta especial. Alrededor del 40 % de los bebés holandeses reciben nutrición desarrollada por Picomel.
Jan Kees Verhage, fundador de Picomel, concibió y diseñó la realidad «vertical» de la empresa. Es la única fábrica de los Países Bajos que ha obtenido la certificación de sostenibilidad 'BREEAM-NL Outstanding'. Su visión creativa significaba que también quería desarrollar la máquina del futuro, hoy. Para lograrlo, recurrió a la ayuda del fabricante de máquinas Van Mourik, junto con la tecnología de automatización de OMRON Industrial Automation.
Jan Kees comenta: «Estábamos buscando una empresa que pudiera ayudar a proporcionar una solución total para la automatización. También necesitábamos un fuerte apoyo técnico, desde la prueba de concepto hasta la realización del proyecto. Van Mourik nos recomendó OMRON, y las soluciones de OMRON nos proporcionaron las respuestas necesarias para los retos a los que nos enfrentamos».
Fijación de los estándares para la nueva máquina
Picomel, Van Mourik y OMRON han colaborado estrechamente para desarrollar un nuevo tipo de máquina. Para adaptarse a los retos y problemas del mercado, Picomel ideó una serie de requisitos para la máquina que quería construir: de alta capacidad, pero con un tamaño reducido y cambios rápidos; capaz de manejar productos multiformato y varios tamaños de latas; intuitiva, para que los operarios no tuvieran que pasar por un período intensivo de formación compleja; y, por último, necesitaba ser escalable, sin residuos y con menos ruido que máquinas similares.
Creación de la nueva máquina
Jan Kees añade: «Cada metro cuadrado adicional de espacio tiene costes. Queríamos reducir el espacio y los costes mediante la construcción de una fábrica vertical. También necesitábamos máquinas más compactas. Por lo tanto, nos reunimos con el fabricante de máquinas Van Mourik y los expertos tecnológicos de OMRON. El resultado fue una máquina Servomatic. Se trata de una máquina de llenado de polvo y cierre de latas totalmente integrada que cuenta con el tamaño más pequeño del mundo (6 m²) y proporciona un alto rendimiento. Una fábrica tradicional necesitaría de cuatro a cinco veces más espacio para lograr la misma capacidad».
Martin Dannenberg, director general de Van Mourik Yeast & Packaging, comenta: «Después de un análisis en profundidad, descubrimos que necesitábamos servotecnología para controlar correctamente este proceso. Gracias a este control, y al hecho de que la máquina es relativamente fácil de convertir a otros formatos, podemos lograr un arranque vertical. Esto significa pasar de cero a la capacidad operativa completa en un período de tiempo muy corto».