Mucho más que tecnología porque sí: cuando la automatización industrial se une a la excelencia operativa
Publicado a las 30 de noviembre de 2024 el Operational Excellence
En los últimos años se han producido rápidos avances tecnológicos, con el auge de la IA como tendencia clave. En una encuesta realizada a fabricantes del Reino Unido, EE. UU. y Canadá, el 70 % afirmó haber implementado algún tipo de IA en sus actividades. Esta predisposición a adoptar nuevas tecnologías es muy llamativa, sobre todo porque las industrias manufactureras tienen mucho que ganar con la automatización.
Sin embargo, para algunas empresas, la motivación para adoptar nuevas tecnologías se debe más al miedo a quedarse atrás que a una verdadera comprensión de cómo estas herramientas pueden favorecer sus objetivos de negocio más amplios. Para beneficiarse de las supuestas ventajas de la tecnología, los fabricantes deben hacer mucho más que simplemente sumarse a una carrera tecnológica. La mera incorporación de nuevas tecnologías a los procesos y sistemas existentes no se traducirá automáticamente en mejoras. La IA, el aprendizaje automático, el IoT, la robótica colaborativa y los análisis avanzados solo aportarán valor si están totalmente integrados en la cultura de la empresa.
En OMRON, entendemos esto perfectamente. Para nosotros, la tecnología debe ponerse al servicio de un propósito mayor. No es un objetivo en sí misma, sino una herramienta para fomentar la mejora continua. Esta máxima lleva formando parte del ADN de OMRON desde su creación. Nuestro fundador, Kazuma Tateisi, creía en la búsqueda incesante de la innovación en pro de la sociedad. Así rezaba una de sus frases favoritas: “Primero hay que probarlo”, con la que quería decir que siempre encontraremos una forma de avanzar si aceptamos los desafíos con la mente abierta y actitud positiva.
Excelencia operativa con apoyo tecnológico
Por supuesto, este espíritu de mejora continua es imprescindible para alcanzar la excelencia operativa (OpEx). Solo con él las posibilidades de aumentar la eficiencia de la producción, la flexibilización de la fabricación y la innovación acelerada se vuelven realmente emocionantes. Este enfoque de gestión empresarial aspira a involucrar a toda la organización y a fomentar una cultura donde tanto los directivos como los empleados se comprometan con los resultados empresariales y se vean en disposición de promover el cambio.
Kazuma Tateisi también dijo: “Si tienes margen para mejorar, entonces mejora”. Y no era un simple lema, era una auténtica llamada a la acción que daba forma a la estrategia de automatización de OMRON. Creemos que el verdadero valor de la tecnología reside en su potencial para empoderar a las personas, para permitirles pensar de forma creativa, mejorar los procesos y superar los límites. Es esta alineación entre tecnología e ingenio humano lo que da lugar a las innovaciones más significativas.
Existen numerosos ejemplos de cómo las innovaciones en automatización industrial desarrolladas a partir de esta filosofía pueden contribuir positivamente a la excelencia operativa:
Empoderar a las personas mediante la automatización
Uno de los ámbitos en los que esto se hace patente es en la robótica colaborativa, que nos permite aprovechar las sinergias entre el talento humano y las capacidades tecnológicas. Esta colaboración mejora la eficiencia y permite una fabricación flexible, en la que los humanos y las máquinas colaboran sin fisuras. El aprendizaje automático y la IA son fundamentales para un futuro con una relación armoniosa humano-máquina, en el que los robots aprendan patrones e instrucciones de los humanos, se muevan de forma inteligente para ayudar con el trabajo manual e interactúen con los humanos y otros robots.
Mejora continua con gemelos digitales
La tecnología de gemelos digitales es otro ejemplo de cómo la automatización industrial puede impulsar la mejora continua. La creación de una versión virtual de una máquina o una línea de producción permite comprobar, sin interrumpir la fabricación real, las posibles mejoras de diseño, procesos y sistemas. Los riesgos se pueden minimizar, el coste de los proyectos se puede optimizar, y el tiempo necesario para desarrollarlos, construirlos y probarlos se puede reducir significativamente. La tecnología de gemelos digitales también permite al personal que trabaja a pie de línea participar en las decisiones sobre nuevos productos y compras, así como identificar mejores formas de trabajar. En resumen, un gemelo digital favorece la mejora continua, al aportar datos objetivos para la toma de decisiones y facilitar y reducir el coste de los cambios.