¿Cómo puede contribuir la inspección adaptativa mediante IA a la flexibilidad de la producción?

La inspección de calidad mediante IA ayuda a los fabricantes a garantizar la calidad al tiempo que mejora la eficiencia y la flexibilidad

Los consumidores actuales exigen productos personalizados para satisfacer sus necesidades y gustos personales. En lugar de producir artículos «hechos para guardar» y «enviados a stock», los fabricantes deben personalizar los productos para que estén «hechos para mí» y sean «enviados a mí». Esto está revolucionando la producción y obligando a las empresas a replantearse sus procesos. Al mismo tiempo, garantizar que no haya quejas ni defectos es una obligación.

El ojo experto de un inspector de visión detecta rápidamente los errores, pero una tarea rutinaria como esta resulta agotadora y no puede llevarse a cabo en cada paso de la producción, especialmente debido a la actual escasez de mano de obra en el sector. Pero, ¿podría automatizarse en la producción de lotes reducidos y muy variados? ¿Podría un sistema de visión inteligente o un «ojo electrónico» reproducir el discernimiento del ojo humano, con la ventaja añadida de la repetibilidad y la solidez? Las últimas tecnologías de inspección adaptativa mediante IA permiten superar los retos de la inspección de calidad automatizada con mayor flexibilidad, productividad y adaptabilidad.   

Inspección de calidad adaptativa: resultados precisos, menos rechazos

A la hora de automatizar las tareas de inspección visual, uno de los mayores obstáculos que se presentan es la gran variación visual entre diferentes productos que son correctos o aceptables. Dos productos pueden no tener defectos pero sí ligeras desviaciones, como diferencias mínimas en la etiqueta o en la superficie.

El reto consiste en enseñar a un sistema a distinguir entre defectos y ligeras desviaciones. El ojo humano experto puede determinar inmediatamente si estas diferencias afectan a la calidad del producto. Sin embargo, con los sistemas de inspección automatizados tradicionales de visión artificial, la tasa de fallos puede ser demasiado alta. Cada pequeña irregularidad es rechazada, aunque el producto sea perfectamente adecuado y apto para la venta.

Aunque es posible combinar la habilidad humana con la tecnología adaptativa y la IA, este tipo de tecnología a menudo requiere conocimientos especializados de TI y software. ¿Cómo puede una máquina alcanzar el nivel de un inspector capacitado sin recurrir a ingenieros expertos y sin dedicar mucho tiempo a la programación? ¿Cómo puede el sistema distinguir fácilmente la diferencia entre «apto para combinar» o «apto para vender»?

Para superar estos retos, OMRON ha desarrollado una nueva solución de inteligencia artificial (IA) para la detección de defectos, que imita las habilidades de los inspectores de calidad expertos. Una vez creada una imagen de referencia a partir de varias imágenes de productos sin defectos mediante el algoritmo de IA, esta puede distinguir las desviaciones que deberían dar lugar al rechazo del producto. Al rechazar menos productos, las empresas ahorran en materiales y desechos. De este modo, se consigue una mayor rentabilidad y una producción más limpia.

La IA puede ayudar a detectar los defectos con una sensibilidad similar a la humana. Además, los productos sin defectos pueden filtrarse de igual manera que con inspectores de calidad expertos. Otra ventaja importante es que la herramienta de IA funciona de forma sistemática, fiable e ininterrumpida.

Un sistema de inspección mediante IA también permite flujos de trabajo ágiles en la fabricación. Las empresas pueden reaccionar de forma mucho más rápida y flexible a los nuevos requisitos de los clientes y adaptar las líneas de producción e inspección. Al mejorar la calidad, se reduce el número de rechazos y se minimiza el tiempo de cambio, lo que mejora considerablemente la eficacia general de los equipos.

Asimismo, la configuración es extraordinariamente sencilla. El sistema aprende mediante imágenes en las que los inspectores humanos han detectado defectos en lugar de buscar defectos específicos. Esto aumenta la flexibilidad del sistema, e independientemente del tipo de material, el color o el tamaño, los defectos pueden extraerse de forma fiable sin necesidad de definiciones ni ajustes previos. Todo ello lo convierte en un sistema ideal para la producción de lotes reducidos y muy variados. La inspección adaptativa es un elemento fundamental para una fabricación flexible y orientada al futuro, para aumentar la eficiencia general de los equipos y la calidad, mejorar la asistencia a los empleados y optimizar los procesos.

Resumen

La escasez de recursos humanos y la diversificación de las necesidades de los consumidores han aumentado la demanda de sistemas de inspección visual autónomos y adaptativos. La visión artificial combinada con la IA puede aprender una variedad de tipos de defectos con antelación, creando así un sistema de detección de defectos que permite una inspección similar a la humana sin necesidad de complicadas configuraciones o programación. OMRON puede ayudar a los clientes a crear soluciones de automatización industrial para mejorar la vida de las personas, y contribuir a crear fábricas ideales para trabajar, combinando a la perfección tecnologías como la detección, el control, la visión, los robots y la IA.

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