La sensación de crecimiento o satisfacción de los trabajadores de centros de producción mental y físicamente agotadores es escasa, y esto puede hacer que disminuya la productividad. Nuestras soluciones permiten que las máquinas y los robots que trabajan junto a los humanos se coordinen y trabajen sin problemas de acuerdo con las posiciones y los movimientos de los humanos, creando un entorno seguro en el que las máquinas puedan respaldar o asumir las tareas de los trabajadores cuando sea necesario. Esto alivia la carga mental y física de los trabajadores y aumenta la productividad laboral.

Dado que las necesidades de los consumidores cambian cada año de forma más rápida y drástica, los centros de producción deben ser capaces de producir de forma flexible y eficiente los productos necesarios en las cantidades necesarias para responder a la fluctuación de la demanda. Nuestras soluciones le permiten adaptarse a la fluctuación de la demanda y, al mismo tiempo, aumentar la productividad de la mano de obra. Realizan un seguimiento preciso de las competencias de los trabajadores y de las condiciones de las máquinas del centro para decidir la mejor forma de posicionar y dividir la mano de obra entre los trabajadores humanos y las máquinas, de modo que se puedan fabricar los productos adecuados en el momento adecuado. Por ejemplo, la productividad total de un centro se puede maximizar haciendo que los trabajadores humanos asuman más tareas durante el día, cuando hay más mano de obra disponible, y que las máquinas se encarguen del trabajo durante la noche.